lunes, 22 de septiembre de 2014

Entrevista a Ramon Prats Roura: "Necesitamos que el arte esté en la sociedad como una cosa natural".


© R.Domi_nguez-Agusti_ Ferna_ndez Liquid Quintet, Jamboree 02.04.2013-2 

Ramon Prats Roura es un baterista catalán formado, entre otros, en el Taller de Músics de Barcelona y en el ESMUC (Escola Superior de Música de Catalunya). Además de su actividad como músico también imparte clases de batería y perfeccionamiento rítmico en el Conservatorio Superior de Música del Liceu.

Como suele suceder en el mundo de jazz, Prats forma parte de varios conjuntos entre los que se encuentran Sindicato Ornette, Duot, Liquid Trío, Movin Wes, Comaneci…. También participa como sideman con multitud de músicos, como por ejemplo: Ernesto Aurignac, Aruán Ortiz, Marcel.lí Bayer, Marco Mezquida, Agustí Fernández… y desde hace ya unos cuantos años, celebra cada jueves una sesión de música improvisada en el local Robadors 23 de Barcelona (no os las perdáis)

Poseedor de una técnica exquisita, Prats se desenvuelve a la perfección en los más variados registros. Acompañamientos (llamémosle) jazzísticos académicos, desarrollos vanguardistas de exploración y free jazz, libre improvisación… y por lo que he podido escuchar, es un músico que no tiene perjuicios para nada y que realmente siente devoción por su instrumento.

Muy amablemente nos concede esta breve entrevista que os ofrecemos. Espero que os resulte interesante y disfrutéis de ella. Las fotografías para esta entrevista las ha proporcionado Roberto Domínguez.

Jesús Mateu Rosselló: ¿Cómo empieza tu historia con el Jazz? ¿Recuerdas las primeras grabaciones que se cruzaron en tu camino?

Ramon Prats: Con colegas del instituto montamos un grupo de rock y mis padres me dijeron que debía hacerlo bien y apuntarme a clases de batería. Tuve la suerte que en aquel momento en Banyoles había gente que estaba muy metida en el mundo del jazz. En concreto César Martínez, mi primer profesor de batería, fue el primero que me pasó una cinta de casete y me acuerdo perfectamente: Sonny Clark (trío en una cara y quinteto en la otra). El segundo casete que me pasó fue una recopilación de baterías de jazz hecha por David Xirgu. Antes de esto no tenía ni la menor idea de qué era el jazz.

Jesús Mateu Rosselló: ¿Cómo definirías con palabras la música etiquetada como JAZZ? ¿Es necesario etiquetar la música en diferentes estilos?

Ramon Prats: No sé cómo definir la palabra JAZZ, pero diría que es lo que tienen en común Louis Armstrong, Miles Davis, John Coltrane, Billie Holliday, Ornette Coleman, Duke Ellington, Paul Motian, Mark Turner,...
Las etiquetas ayudan a entender el arte, pero no hay que ir más allá. Si no tienes ni idea de jazz, por ejemplo, te va a ayudar el hecho de escuchar los discos con alguna guía o esquema de los estilos (hard bop, west coast, etc) que te ubique en el mapa sonoro. Una vez situado, no tiene más importancia, porque en el fondo cada artista tiene su manera de expresarse, y las etiquetas unifican en vez de potenciar la personalidad de cada uno. Y lo mismo pasa en la música en general. Al final no tiene mucho sentido pensar en "jazz" o "rock" o lo que sea. Si te gusta la música lo que quieres es buena música.

Jesús Mateu Rosselló: Recientemente leí una entrevista publicada en el año 1963 en la revista francesa Jazz Magazine. El entrevistado era Thelonious Monk y en una de sus respuestas decía lo siguiente: “A mí, nadie me inspiró mis ideas: las busqué dentro de mí” ¿Consideras que has sido inspirado por otros músicos, o por el contrario, todo sale de tu interior?

Ramon Prats: Creo que sale del interior en el sentido que no quiero ser una copia de alguien, pero al mismo tiempo las semillas son la gente a quien escucho, admiro y estudio. Hay fases en las que quiero ser Al Foster o Paul Motian o Elvin Jones... tocar igual, sentarse igual en la batería, etc. Pero al fin y al cabo es un proceso para conocerse a uno mismo.
No aparece la música por generación espontánea, hay un pasado y un presente, y conocerlo ayuda a entenderte a ti mismo para escuchar tu interior.

Jesús Mateu Rosselló: Marcel.li Bayer, Ivo Sans, Agustí Fernández, Marco Mezquida, Oriol Roca, Pol Padrós, Free Art Ensemble, Masa Kamaguchi, Julián Sánchez… ¿Qué demonios está pasando en Barcelona? ¿Qué ha podido originar esta generación tan prolífica de músicos de jazz y libre improvisación? ¿Qué grado de culpabilidad tiene Agustí Fernández?

Ramon Prats: No sé si hay alguna relación o no, con todo esto. Agustí nos ha ayudado a todos los que nos gusta esto, sin duda. Y es indudable que la escena ha crecido, pero desconozco las razones. Hay que tener en cuenta que mientras en Europa en los años 50 el jazz ya estaba presente, en España no había casi nada. Poco a poco se va tendiendo al equilibrio y por eso la escena va creciendo. Pero creo que cuando llegue al punto "natural" se va a mantener. Partíamos de cero, era fácil crecer. Puede que sea eso, no sé...

Jesús Mateu Rosselló: Pandora, tu último trabajo editado del Ramon Prats Quartet, grabado en directo en el Estival de Jazz de Igualada, es un proyecto muy concreto ya que se trata de una ‘carta blanca’ propuesta por el Estival. ¿Tiene continuidad un proyecto de estas características? ¿Se ha podido mover lo esperado?

Ramon Prats: Hemos hecho varios conciertos después del disco, y tenemos una gira en octubre por Valencia y Andalucía. Hay música nueva y muchas ganas de grabar el segundo disco.
¿Mover lo esperado? Mmmm, ¡nunca hay suficiente! Pero estoy contento con la respuesta que está teniendo.

 © R.Domi_nguez - Walk Tall, Jamboree, 23.01.2014

Jesús Mateu Rosselló: El segundo disco que nos comentas, ¿va a seguir las directrices de Pandora o va a ser algo completamente diferente? ¿Nos puedes adelantar algunos detalles?

Ramon Prats: El primer disco es muy especial por el hecho de que es el primer concierto del grupo y la energía seguro que va a ser distinta en el segundo. Tengo dudas entre grabarlo en directo o en estudio, pero por la música en concreto creo que se puede resumir en una evolución del repertorio anterior.

Jesús Mateu Rosselló: Queda latente que en Pandora, el silencio es un elemento esencial. Explícanos que supone para ti la utilización del mismo en la música.

Ramon Prats: En Pandora el silencio es fundamental ya que el repertorio nace de ahí. El paso del silencio absoluto al sonido es muy violento. Si se pudiera "mirar" el aire sería como tirar una piedra en un charco de agua, aparecen las olas y mueven todas las moléculas de agua. La idea es tratar el silencio con cuidado, haciendo vibrar el aire con simpatía con el instrumento y con la menor violencia. Se trata de un silencio más cercano a Morton Feldman que a John Cage.
El silencio en la música en general siempre es importante, sin silencio no hay música. Si la música es expirar, el silencio es inspirar.

Jesús Mateu Rosselló: Hace unas semanas reseñamos el disco Breaking the Lab! Que grabaste en directo con Agustí Fernández y Mats Gustafsson en la Sala Jamboree de Barcelona. Contamos en la reseña que no habías tocado nunca con Mats, creo que tan siquiera lo conocías personalmente. ¿Cómo fue la experiencia de lanzarse al vacío con estas dos bestias?

Ramon Prats: Fue muy fácil, la verdad es que todo fluyó de manera muy natural. No sentí que tuviera que forzar nada en ningún momento. Ellos dos son grandes músicos a nivel individual, pero además llevan mucho tiempo tocando en dúo. Eso ayudó, supongo. Y el hecho de pensar en disfrutar y no en querer hacerlo bien.

Jesús Mateu Rosselló: ¿Tienen o deberían tener cabida proyectos de libre improvisación dentro de los festivales de jazz más reconocidos, o están condenados (según se mire) a los pequeños espacios como puede ser el bar-local Robadors 23?

Ramon Prats: El problema lo veo en que es una música que tiene poco público. Eso explica porque se programa poco. La duda es si se puede conseguir más público programándose más. No lo sé. Pero me temo que aunque a todos nos gustaría que tuviera más aceptación, está bien así. Por el bien de la música. Si tiene aceptación popular masiva se tiende a canonizar, a decir lo que está bien y lo que no. Y esta música se va a morir el día que se intente comprender de este modo.

Jesús Mateu Rosselló: En relación a la respuesta quiero hacer un pequeño apunte. Pongo un ejemplo: En el mes de febrero visité precisamente Robadors 23 y asistí a la sesión de los jueves con un amigo que no está metido de lleno como puedo estar yo en el mundo de jazz y de la libre improvisación, eso sí, tiene muy buen gusto. Acabada la sesión me dijo que quedó completamente hipnotizado y que no había visto nada igual, que disfrutó muchísimo. Por lo que imagino que mucha gente podría disfrutar de esta música sin saber que existe y el único escaparate que veo son los festivales. Claro está que muchísima gente que asiste tienen un concepto (paradójicamente) muy cerrado del jazz. Podrían llevarse una sorpresa. No sé si estás de acuerdo.

Ramon Prats: Estoy seguro que hay mucha gente que no conoce esta música y que le apasionaría. Y quiero pensar que cada día hay más gente como el amigo que comentas. Los programadores pueden arriesgarse y el público también, claro. Pero también puede pasar al revés: si no es el sitio o público adecuado y se programa algo así, puede que la gente cierre sus puertas a esta música para siempre.
Por lo que comentas del público cerrado, tengo la impresión que la improvisación libre se está programando y aceptando más dentro del circuito indie pop/rock que en el del jazz, actualmente.

 © R.Domi_nguez-Agusti_ Ferna_ndez Liquid Quintet, Jamboree 02.04.2013

Jesús Mateu Rosselló: Mirando en tu página web se puede observar que tu actividad es bastante frenética. Imagino que es muy gratificante tener proyectos tan estimulantes como Duot, Ramon Prats Quartet, Sindicato Ornette, Movin’ Wes… además de todos los proyectos ajenos en los que participas como sideman. ¿Te gustaría poder dedicar más tiempo a otros menesteres como puede ser la composición, o te sientes perfectamente cómodo en esta situación? ¿Es por puro placer y enriquecimiento personal o es por qué no se puede sobrevivir de esta música si no se está en muchas formaciones?

Ramon Prats: Me encanta participar en estos proyectos, y no lo hago por necesidad. Pero es verdad que a veces la agenda se satura y me gustaría tener más tiempo para practicar, escribir, etc. Nunca me he planteado tener más o menos grupos, digamos que ha surgido así.

Jesús Mateu Rosselló: Hablando de proyectos, cuéntanos como está funcionando el proyecto Solot (batería sola) cuando puedes ponerlo en práctica. Leí en una entrevista del año 2011 que no te planteabas hacer una grabación de esta experiencia. ¿Sigues pensando igual?

Ramon Prats: En los conciertos de Solot hay discos para el público. Se trata de una carátula sin nada dentro. Solo hay un texto que habla de la memoria como un terreno fértil en el que lo que se deposita tiene su curso. La semilla es la audición del concierto, y va evolucionado en la memoria de cada uno. Por esto creo que no tiene sentido grabarlo.

Jesús Mateu Rosselló: Para redondear el tema proyectos, además del segundo disco del cuarteto ¿Qué grabaciones van a ver la luz en un futuro inmediato?

Ramon Prats: Una con el cuarteto de Josep Tutusaus, otra con Marco Mezquida, Tom Chant y Johannes Nästesjö, otra con Johannes y Alfonso Muñoz (aka Don Malfon), y en septiembre grabamos con el grupo de Ernesto Aurignac.
 
Jesús Mateu Rosselló: Varios de tus trabajos están auto editados. Cuando has optado por esta decisión, ¿ha sido porque no ha quedado más remedio o por aquello de tener el control total del producto? También, en estos tiempos, estamos viendo como muchos artistas optan por el crowdfunding, ayer mismo vi que Félix Rossy y Albert Sanz han optado por esta vía para publicar una edición en vinilo de un directo, ¿has pensado en esta posibilidad?

Ramon Prats: Los discos auto editados son por distintas razones. O bien no se ha encontrado la discográfica adecuada, o bien existe y no está interesada en el disco, o bien por comodidad. Comodidad en el sentido que la autoedición es rápida si tienes un mínimo de dinero para, al menos la primera tirada de copias. En realidad soy un poco perezoso y poco ambicioso para estas cosas, me cuesta contactar con gente de discográficas, etc. Lo mismo me pasa con el crowdfunding. Digamos que soy partidario de hacer una tirada corta de discos y al venderlos tener más dinero para las otras tiradas. Si con el futuro se da a conocer el proyecto y hay alguna discográfica interesada, ya se verá.

Jesús Mateu Rosselló: Hay muchos buenos músicos que son completamente autodidactas. ¿Crees que para ser un buen músico hay que estudiar música? ¿Se está enseñando correctamente en conservatorios o escuelas de música este arte?

Ramon Prats: Es una pregunta muy compleja. Creo que cada persona tiene su curso y sus necesidades. Hay ejemplos en todos los casos: grandes músicos autodidactas y también grandes músicos que han salido de conservatorios. Nada te garantiza nada, ni ir a tal escuela o a clases con este o el otro. Creo que cada uno tiene que buscar donde siente que va a crecer y aprender.

© R.Domi_nguez-Agusti_ Ferna_ndez Liquid Quintet, Jamboree 02.04.2013-3

Jesús Mateu Rosselló: ¿Eres de los músicos que escuchan música o eres de los que se concentran en su obra y prácticamente no le dedican tiempo a la escucha?

Ramon Prats: Soy de los de escuchar música. De todos modos, tengo temporadas de todo. Ahora mismo no estoy escuchando nada en concreto, por ejemplo. Y lo último que he escuchado son los dos discos de Ben Van Gelder, que no lo conocía.

Jesús Mateu Rosselló: ¿Qué músicos quieres reivindicar que estén en la escena jazz o de libre improvisación que consideres que están infravalorados o bien que sean completos desconocidos?

Ramon Prats: Hay tantos...

Jesús Mateu Rosselló: Por primera vez veo que artistas como Mut Trío, Miguel Fernández, los mencionados Felix Rossy y Albert Sanz, y próximamente Hidden Forces Trío están editando en vinilo, así como Marco Mezquida manifestó su deseo de, en un futuro, intentar hacer alguna edición limitada en este formato. ¿Hay posibilidad de publicar tus próximos trabajos en este formato?

Ramon Prats: ¡Nunca se sabe! Me gustaría, tal vez el segundo disco del cuarteto. El CD tiene una gran ventaja: para viajar ocupa poco espacio, y hoy en día que los discos se venden mayoritariamente en conciertos, el LP es un poco incómodo, aunque muy romántico y con un sonido especial.

Jesús Mateu Rosselló: ¿Crees que son necesarias las subvenciones públicas para empujar cualquier forma de arte? Personalmente tengo sentimientos contradictorios. Por una parte, entiendo que el dinero corrompe rápidamente y la gente siempre se aprovecha de ello, (como por ejemplo los muy abultados presupuestos para según que festivales) por otra parte, entiendo que apostar por la cultura es un bien para el futuro, y esto, a los dirigentes actuales, no les interesa como bien han demostrado.

Ramon Prats: Creo que falta educación. Esa es la raíz del problema. Necesitamos que el arte esté en la sociedad como una cosa natural, del día a día y no como una cosa puntual. Se quiere compensar esta falta de educación con subvenciones. Es una ayuda, si, pero en realidad es una muleta.

© R.Domi_nguez-Concierto despedida Du_o Duot, Robadors23, 10.09.2013

Entrevista realizada para la revista digital Tomajazz Enlace: Entrevista en Tomajazz

Texto © Jesús Mateu Rosselló, 2014
Fotos © Roberto Domínguez, 2014


sábado, 20 de septiembre de 2014

Hasier Oleaga: Cantus Caterva II (Errabal, 2014)

Hasier Oleaga: Cantus Caterva II (Errabal, 2014)


Hasier Oleaga es uno de los bateristas más activos del País Vasco. Entre otros, forma parte de los conjuntos: Nervermind Trío, Sant Pau 44, Iñaki Salvador Trío, Zafari Project… incluso ha colaborado con el gran Mikel Laboa y con Mikel Urdangarín. En el año 2012 Hasier Oleaga publicó Cantus Caterva (Errabal, 2012) primer disco como líder del baterista. Dos años después publica la segunda parte repitiendo la formación.

Cantus Caterva II (Errabal, 2014), como bien indica el título, sigue la estela de su predecesor, es decir, siguen las excelentes composiciones (todas de Hasier Oleaga) que el quinteto traslada a la perfección. Estas se mueven entre diferentes estilos sin llegar a ser ninguno en concreto, es decir, se intuyen los gustos de Oleaga, y este coge todo lo que ha escuchado y crea nuevas composiciones que fluyen pero que muy acertadamente. Las labores de composición, como se puede escuchar, dejan muchos espacios libres para que los músicos se explayen a sus anchas. Y este aspecto me parece de gran generosidad por su parte ya que es una demostración de confianza hacia los músicos que ha elegido para que interpreten su música. Además, el baterista no busca en ningún momento ser protagonista ejecutando largos solos ni nada parecido, es más, no realiza ninguno en todo el álbum y este hecho dice mucho de él. Una vez escuchado el disco varias veces, recomiendo volver a colocar el CD en el reproductor y destinar un porcentaje muy elevado de concentración en la percusión que realiza. Hay un trabajo lleno de matices muy disfrutable que hace las delicias del oyente, sus acompañamientos son en ocasiones complejos y sencillos a la vez.

En relación a los músicos que le acompañan, aunque digo desde ya que todos realizan un trabajo exquisito e inteligente, quiero destacar a Mikel Andueza (saxo alto) y a Julen Izarra (saxo tenor) que al igual que en el primer disco, vuelven a estar espléndidos y diría que se consagran como un dúo que se entiende a la perfección tanto en la exposición y conclusión de melodías como en la interacción e improvisación. Iñaki Salvador demuestra su versatilidad abordando diferentes maneras de afrontar el piano y el teclado, buscando diferentes sonoridades y aplicando su muy buena técnica. El guitarrista Jorge Abadías realiza un trabajo perfecto, casi se podría decir que su interpretación es a dos voces, es decir, el sonido de guitarra y su propia voz que va tarareando las notas que toca al momento (aunque no en todos los temas en los que interviene). Jon Piris crea un potente sonido rítmico que se intercala entre las notas escritas e improvisadas. Todo ejecutado de manera ejemplar y sin buscar protagonismos innecesarios. Concretamente hay un único solo en el que saca un sonido lírico al contrabajo, muy breve y muy bien aplicado al tema. Y para acabar, Fernando Neira participa únicamente en el último tema (cumpliendo perfectamente) que por cierto, tiene una colaboración vocal muy especial en los últimos segundos.

Aunque nos hemos centrado en este último disco, animo a la gente a que descubra los dos Cantus Caterva, para mí ha sido un gran descubrimiento y escuchar los dos discos me parece una buena manera de entender el concepto del conjunto así como de observar la evolución y lógica de su música.

Reseña escrita para la revista digital Tomajazz Enlace: Reseña en Tomajazz

© Jesús Mateu Rosselló , 2014

Hasier Oleaga: Cantus Caterva II

Mikel Andueza (saxo alto) Julen Izarra (saxo tenor) Iñaki Salvador (piano y teclado) Jorge Abadías (guitarra) Jon Piris (contrabajo) Fernando Neira (bajo eléctrico) y Hasier Oleaga (batería)

“Lekitto Eta Kitto”, “Weyland Txirrindularia”, Solvitur Ambulando”, “Argitasunaren Alde Iluna”, “Niger Hole”, “Mayi”, “Ziriña 2.1” y “Zure Gaileta Neure Kafean Bustitzen Duzunean”

Todas las composiciones han sido escritas por Hasier Oleaga, y grabadas en “Pottoko Studio” de Beasain el 1 y 2 de marzo de 2014.

martes, 16 de septiembre de 2014

Microrrelato #6



Observó que su mano se desprendía. Poco después el brazo siguió el ejemplo. En un breve espacio de tiempo su cuerpo quedó sin extremidades quedando inutilizado. Su nuevo estado le permitía hacer lo mismo que la gran mayoría. Pero no se conformó. No sin mucho esfuerzo consiguió empujar sus muñones desde dentro produciendo más extremidades. Poco a poco, contra su voluntad, volvían a desprenderse. Cansado del gran esfuerzo que le suponía decidió abandonar quedándose con los muñones. A día de hoy cree profundamente ser feliz.

© Jesús Mateu Rosselló, 2014

sábado, 13 de septiembre de 2014

Alberto Vilas Quinteto: Crónica Cromática (Free Code Jazzrecords, 2014)

Alberto Vilas Quinteto: Crónica Cromática (Free Code Jazzrecords, 2014)




Segunda referencia discográfica del quinteto del pianista y compositor gallego Alberto Vilas. En el año 2011 presentó el álbum Experianza (Azos Jazz, 2011) y hace escasos meses llegó este Crónica Cromática (Free Code Jazzrecords, 2014) en el que repite el mismo quinteto sin variación.

Crónica Cromática sigue un poco la estela de su predecesor (aunque diría que con mayor cohesión), es decir, hay un trabajo de lectura y ejecución importante, así mismo, hay una labor de composición por parte de Alberto Vilas (todas las composiciones corren a cargo del pianista) que el quinteto sabe trasladar y que llega con buena energía. Vilas saca partido a su formación clásica para afrontar formas e ideas que se pueden denominar perfectamente jazz, pero ojo, hay una personalidad muy marcada, el estilo del quinteto es muy reconocible. Hay un toque especial que lo hace suyo. El álbum se podría decir que es un trabajo bastante académico, sin escapadas a zonas muy escarpadas (aspecto que no tiene que ser para nada denostado), todo está hecho con mucho mimo, profesionalidad y buenas ideas. Se disfruta mucho de las melodías así como de las improvisaciones. Estas, también siguen un curso bastante melódico, sin grandes altibajos pero realizadas con elegancia y buen hacer. Los temas no son interpretados necesariamente por el quinteto al completo, aspecto que me parece un acierto para dar cierta variación dentro de la homogeneidad del conjunto. Para acabar, al igual que en el primer álbum, Alberto Vilas desarrolla un tema a piano solo perfecto para despedir.

En el apartado físico del CD, hay que destacar el buen gusto de Alberto Vilas al presentar este trabajo con una caja estilo digipack (aunque no exactamente) de cartón. En el interior contiene un folleto-poster con una fotografía de un cuadro del autor Manuel Nantes. Hay que recordar que en el primer disco del quinteto ya había en portada una pintura original del mismo pintor y según pude leer en la entrevista que concedió Alberto Vilas a Creativa Canaria el año pasado, Nantes realizó la obra escuchando el disco y la terminó escuchando la última nota del mismo. Desconozco si en Crónica Cromática ha seguido el mismo protocolo, si bien se podría decir que hay una conjunción entre dos estilos diferentes de arte. Ideas que fluyen, se intercalan y viajan hacia nosotros.

© Jesús Mateu Rosselló, 2014


Reseña escrita para la revista digital Tomajazz Enlace: Reseña en Tomajazz


Alberto Vilas Quinteto: Crónica Cromática

Alberto Vilas (piano) Rosolino Marinello (saxo alto y saxo soprano) Felipe Villar (guitarra) Juansy Santomé (contrabajo) y Javier Barral (batería)

“Soños de Tartaruga (a Lonely George)”, “Instante Distante”, “Coma Peixe Na Auga”, “Da Man Do Vento”, “Albatros”, “Entre Vías”, “Onírica”, “Vai Pasar”, “Ronsel”, “Crónica Cromática” y “Alma En Calma”

Todos los temas compuestos por Alberto Vilas

Grabado, mezclado y masterizado en Boom Estudios (Gaia, Porto, Portugal) los días 9 y 10 de noviembre de 2013

jueves, 11 de septiembre de 2014

Felipe Villar Trío: Home (Free Code Jazzrecords, 2014)

Felipe Villar Trío: Home (Free Code Jazzrecords, 2014)


El guitarrista vigués Felipe Villar presenta su primer trabajo como líder después de co-liderar los proyectos Rua Da Alegría y Travel Hats (un disco publicado en cada formación). Además participa como sideman del quinteto de Alberto Vilas con dos discos publicados a día de hoy, el segundo de ellos Crónica Cromática grabado solamente dos meses antes que el disco que vamos a reseñar. Para esta primera aventura en solitario, Villar se acompaña del baterista Max Gómez y del contrabajista José Manuel Díaz formando el Felipe Villar Trío.

Home es el título de este trabajo homónimo. Y tiene mucho sentido ya que se grabó en su propia casa en un estudio que, como explica en el libreto, va construyendo poco a poco y en el que pretende, aparte de realizar grabaciones, hacer pequeños conciertos, dar clases, hacer sesiones, estudiar…. Y aparte de lo que estoy diciendo, tiene sentido porque el resultado del disco transmite tranquilidad… relax… Da la sensación de que los tres músicos se sienten cómodos y relajados, vamos, como cualquier persona en su casa. Max Gómez y José Manuel Díaz son los perfectos huéspedes de un genial anfitrión.

El disco se compone de nueve temas, seis de los cuales son composiciones originales de Felipe Villar y los tres restantes son las siguientes versiones: “You Go To My Head” (Fred Cots), “Duke Ellington’s Sound Of Love” (Charlie Mingus) y “Everything Happens To Me” (Matt Denis). Tanto las composiciones originales como las versiones son coherentes con el concepto del disco. El trío consigue algo muy difícil, que un disco que casi se podría decir que es lineal (no hablo negativamente) consiga que estés disfrutando de lo lindo en cada tema. Me refiero a que mantener un disco entero, sin que existan grandes momentos de intensidad ni grandes bajadas, sino que mantiene buen swing… buen hacer… todo ejecutado con mucha tranquilidad y que no se pretende en ningún momento demostrar virtuosismos ni, como diría el Cifu, demostraciones circenses, ni el disco lo necesita en absoluto. Villar realiza unas composiciones que enganchan, en mi caso siguen en mi cabeza y las tarareo durante varios días. Está claro que es un disco melódico y de retirada bastante clásica, pero esto no me impide para nada el placer de escucharlo. Evidentemente, hay momentos para la improvisación siempre dentro del concepto explicado.

Felipe Villar tiene una técnica muy elegante, toca la guitarra con mucha suavidad, casi se podría decir que la acaricia y esto se transmite a través de las notas que proyecta hacia nosotros. El trabajo de la rítmica me parece un gran acierto, Gómez y Díaz no se limitan a acompañar a Villar haciendo un ritmo clásico, sino que dentro de este clasicismo, hacen pequeñas diferenciaciones y variaciones que enriquecen el trabajo. Home es un trabajo excelente en su planteamiento, ejecución y desarrollo.

Tengo la impresión de que Felipe Villar dará mucho de qué hablar en los próximos años.

© Jesús Mateu Rosselló, 2014

Reseña escrita para la revista digital Tomajazz Enlace: Reseña en Tomajazz

Felipe Villar Trío: Home

Felipe Villar (guitarra), Max Gómez (batería), José Manuel Díaz (contrabajo)

“Optimism” , “Duke Ellington’s Sound Of Love” , “Cinisi” , “23 Blues” , “Bigman (Para Quin Alborés)” , “A Thousand Miles” , “You Go To My Head” , “Bluefun” y “Everything happens to me”
Todas las composiciones son de Felipe Villar excepto: “You Go To My Head” (Fred Cots), “Duke Ellington’s Sound Of Love” (Charlie Mingus) y “Everything Happens To Me” (Matt Denis)

Grabado y mezclado en Coia (Vigo) por Felipe Villar y con la ayuda de Mincho Alejos, en enero de 2014.

miércoles, 3 de septiembre de 2014

Félix Rossy & Toni Vaquer (Summer Band Fest. Sala Dante. Palma de Mallorca. 14.08.2014)

Summer Band Fest

Lugar: Sala Dante. Palma de Mallorca
Fecha: Jueves 14 de agosto de 2014. 22:00 h

Formación:
Felix Rossy: Trompeta
Toni Vaquer: Piano

Aunque el destino es como es, imagino la educación musical que supongo recibió Félix Rossy en su infancia además de ver a su padre (Jorge Rossy) tocando con infinidad de buenos músicos tanto en conciertos como en su casa. También puedo entrever que la música que salía de los altavoces de su casa debía ser de la mejor. Y visto lo visto, vaya si caló hondo en sus entrañas. Pero esto que parece tan evidente es algo que nunca se sabe. De hecho, no estoy nada seguro de que tenga algo que ver. Pongo mi propio caso como ejemplo. No tengo un solo antecedente que escuchara música asiduamente y de manera tan visceral como lo hago yo. En mi casa (y colegio), nunca se escuchó buena música, por esto, creo que es algo que tiene que salir de uno mismo… Pero sigo dudando y pienso que si desde bien pequeños tuviésemos una buena educación cultural (y por lo tanto, musical) en los colegios, y que esta se integrara como una cosa natural y evidente, habría más gente interesada y por lo tanto el país se enriquecería muchísimo a nivel cultural. Pero bueno, que cada uno saque su conclusión. Sigo con Félix Rossy. Si al trompetista no le hubiera interesado de verdad la música esto se notaría muchísimo en su manera de entender la música y por lo tanto, en su manera de ejecutarla, y os puedo asegurar después de ver el concierto y de hablar con él un buen rato, que es un auténtico apasionado de la música y de la profesión de músico, así como de la exploración de su instrumento y de la transmisión de emociones a todo aquel predispuesto.


 Esta noche se acompaña del joven pianista, compositor y arreglista Toni Vaquer, del que no tengo demasiada información y apenas hay en la red (y es de Mallorca al igual que yo, pero lo de siempre, nadie es profeta en su tierra, sino pensad en Agustí Fernández). Por lo que veo está tocando en formaciones con excelentes músicos como por ejemplo Oriol Roca, Ernesto Aurignac o David Mengual (este último incluyendo en la David Mengual Free Spirits Big Band las seis suites “vertebrats” compuestas por Vaquer). También hablamos brevemente  y me comenta que actualmente está estudiando composición en la Berklee College of Music de Boston y que le queda un año entero en los EUA. Me confirma que en breve habrá referencia discográfica de la cual estaremos muy atentos. Lo que este chico puede llegar a hacer puede ser muy grande. Estad bien atentos a este nombre.

Esta noche actúan a dúo dentro del Summer Band Fest en la Sala Dante en Palma de Mallorca. Hay que decir que esta sala está programando con muy buen criterio, sin ir más lejos pude ver hace unos meses a Marco Mezquida a piano solo.

Empieza el concierto con una improvisación a dúo. Y vaya si se pasean con soltura y relajación por los parajes que ellos mismos crean. Félix, sentado en una silla y colocando la trompeta hacia abajo (marca de la casa), va desgranándose a él mismo ideando y ejecutando lo que su interior le reclama, así mismo, Toni Vaquer pulsa las teclas precisas para que haya una conjunción muy especial entre ellos. Se puede sentir la energía. Las miradas de complicidad se suceden y generan más música. Acabada la improvisación, siguen con varios standars entre los que están “Jitterburg Waltz” de Fats Waller, y “You’d be so nice to come home to” de Cole Porter. La visión que plasman de estos temas me parece de una inteligencia y una madurez ejemplar. Evidentemente la melodía es muy reconocible pero esta va mutando y nunca suena exactamente igual. Hay creación dentro de algo ya creado. Las escapadas tanto del trompetista como del pianista enriquecen muchísimo la escucha. Aquí hago un pequeño paréntesis: finalizado el concierto, hablando de este preciso tema, Félix me comenta que, en la relación a la interpretación de los standars, siempre depende mucho del momento, es decir, un día el cuerpo y la mente pide mucha experimentación en la melodía, en cambio, otras veces se disfruta muchísimo de la lectura pura siempre desde el interior por lo que es un tema sencillo y complejo a la vez. Para este concierto, el dúo no ha buscado en ningún momento ser específicamente jazz o algo concreto. Han elegido un repertorio y con sus instrumentos han expuesto lo que en aquel momento su corazón y mente les ha dictado en tiempo real. Han demostrado que para ellos, las etiquetas no son para nada importantes. Han creado música y un ambiente en el que no entrar, es demasiado difícil.

Sigue el concierto y el dúo nos deleita con una pieza compuesta horas antes por lo que es una exclusiva para el poco público que se ha acercado. ¿Y que sucede en el escenario? Introducción a piano solo de Toni Vaquer que demuestra su tremenda elegancia tocando el piano, además de exponer una melodía muy bella. Al poco tiempo se incorpora el trompetista que interpreta la composición y los dos empiezan a interactuar, la improvisación hace acto de presencia, hay ganas de experimentar. Más complicidad. Más creación de ambiente. Más música.

Para finalizar dos versiones de temas que no tienen nada que ver con el jazz, “Brigas Nunca Mais” de Antonio Carlos Jobim y Vinicius De Moraes y “Hey Jude” de John Lennon y Paul McCartney. Y lo que suena son efectivamente estos dos temas pero transformados y llevados al terreno Rossy-Vaquer, es decir, siguiendo el concepto de todo el concierto, y los dos temas se integran a la perfección. Más improvisación, más complicidad, más acierto en las notas elegidas y más acierto en el inicio, desarrollo y conclusión de los temas. Finalizado el concierto, Félix comenta que aunque les encanta la música etiquetada como jazz, también disfrutan improvisando sobre temas que no tienen nada que ver aunque siempre llevándolos a su propio terreno… ¿Porqué siempre improvisar sobre temas puramente de música catalogada como jazz? Música, sentimientos que se transmiten y se perciben…

Poco más puedo decir para concluir. Si tenéis la oportunidad de ver a estos músicos no lo dudéis. Aman la música. Aman ser músicos.

Crónica escrita para la revista digital Tomajazz Enlac: Crónica en Tomajazz

Texto y fotos: © Jesús Mateu Rosselló, 2014